Ste Burke compró una bicicleta valorada en 1600 euros por poco más de 90. Enseguida se dio cuenta de que había sido robada, así que, poniéndose en la piel de su legítimo propietario, decidió hacer todo lo que estuviera en su mano para devolvérsela. Ste acudió a Twitter y en cuestión de horas contactó con el dueño de la bicicleta, quedaron, él llevó la llave que abría el candado y también la documentación de la bicicleta, así como una factura. El dueño de la bicicleta quiso recompensarle devolviéndole lo que había pagado pero Ste se negó.