Éste artículo lo escribo a raíz de ver la serie España de Borbón, de Albert Pla: www.youtube.com/watch?v=P9oF7s6gFOI
Los patriotas de clase trabajadora no son nuestros enemigos, puede tratarse de personas íntegras que tan sólo se han creído las mentiras que les cuentan los que más prisa se dieron en agitar la bandera; aquello que representa la comunidad...
El patriotismo, cuando no entraña un menosprecio hacia lo extranjero, es una actitud sana, productiva; es un compromiso con tu comunidad, con tu tierra... A veces el pensamiento crítico viene acompañado de un desapego, de cierta carencia de compromiso con la comunidad, de cierta misantropía y ésto nos hace improductivos, nos hace personas retraídas que aún teniendo grandes cosas que aportar; perspectivas más ricas, no ofrecemos...
Suele haber dos tipos de personas; los muy apegados a su entorno, caracterizadas por tener miedo a la soledad y los muy desapegados, caracterizados por tener miedo a la compañía, el término medio es lo extraordinario en nuestra sociedad y esos términos medios están destinados a guiar a sus comunidades en la buena dirección, pues gozán de la perspectiva que da el afrontar la soledad; la única forma de acercarte a la verdad y del compromiso con sus iguales; del sentir que estás dónde perteneces..
A donde quiero llegar es a que puede que esas personas llanas, a las que aveces miramos por encima del hombro, no sean nuestros enemigos, sino compañeros extraviados, sin la menor perspectiva, a merced del entorno social (incluyendo ahí a los medios de comunicación), y que incluso quizás nosotros tambíen podamos aprender algo bien valioso de ellos...
