El colectivo de pacientes que podrán beneficiarse de este tipo de tratamientos (personas con esclerosis múltiple, algunos tipos de epilepsia, para aquellos con náuseas y vómitos como consecuencia de la quimioterapia, endometriosis, dolor oncológico y dolor crónico no oncológico, incluido el dolor neuropático) permanecen a la espera ante el más que evidente retraso del organismo regulador español.