Hace siglos, cuando los dragones surcaban los cielos y los malditos ganaban la guerra, los 17 reinos y las dos ciudades libres fueron unificadas bajo el indómito poder del caudillo, cuyo nombre todavía perturba el alma de esta desgraciada tierra.
Catalunya, Reino indómito, cuya vida concurre en atestadas calles llenas de forasteros, furcias, desdeñados usurero y el maldito opio de las justas en el Campo Nuevo. Este pueblo eligió ser vasallo del gran Lord Pujol.
Siendo amo y señor de esas tierras, Lord Pujol gobernó desde el resentimiento del <<Madrid nos roba nuestra cerveza,…