Esta lección (o secuencia breve de lecciones) está diseñada para alentar a los estudiantes a reflexionar sobre algunas de las cualidades específicas de la fotografía centrándose en uno de sus pioneros, Albert Renger-Patzsch. Hay muchas maneras de presentar a los estudiantes las grandes ideas, o Threshold Concepts , en fotografía. En mi experiencia, es útil adoptar una guía de la historia del medio, alguien en cuyo trabajo podemos percibir una actitud particular hacia la fotografía y las posibilidades de la cámara como una forma de ver.

Mathieu Stern es un fotógrafo francés que se dedica a experimentar con objetivos de cámaras antiguas adaptados a cuerpos modernos.

En enero de 1943, la Administración de Seguridad Agrícola (FSA) de EE. UU. Envió a John Collier Junior (1913-1992) a fotografiar la vida en Ojo Sarco, Nuevo México. Un pequeño lugar en las montañas de Sangre de Cristo, la misión de Collier inevitablemente lo llevó a la escuela de una habitación de la aldea en la aislada comunidad montañosa hispanoamericana, que tenía 8 cursos y 2 maestros. La mayor parte de la enseñanza era en español, el idioma que se hablaba en los hogares de los niños y, como resultado, rara vez hablaban inglés con fluidez.

Para entender a Klein (en especial la fotografía, nudo máximo de su obra) hay que fijarse en su biografía inicial: nacido en 1928 en una familia de judíos húngaros emigrados, criado en el distrito irlandés de Manhattan, se pasó parte de la Segunda Guerra Mundial como operador de radio, dibujante para animación de propaganda y jugador de póquer para matar los eternos tiempos muertos. Después de la guerra se marchó a la Sorbona parisina, puerta de entrada a Europa, donde tendrá cierto éxito como pintor, con exposición en Italia.

"El mundo subterráneo del metro de la ciudad de Nueva York se convirtió en un escenario de encuentro casual con personas de todos los sectores de la vida, ordinarias y misteriosas. Mis emociones parecían eco de los de los pasajeros que elegí retratar y a veces conversar con – personas que parecían estar cómodas conmigo como si de alguna manera nos conociéramos. En este ambiente opresivo y continuo vis-à-vis, mi enfoque era observar y no atraer la atención, dejando a mi ojo intuitivamente descubrir la realidad bajo la superficie.