El enorme edificio a orillas del Miño en Ourense está abandonado desde 2012. El Centro de Interpretación de los parques naturales de Galicia que el Bipartito presentó en 2007 e iba a ser un Gugenheim ambiental es hoy con el gobierno de Feijóo un bloque de hormigón comido por la vegetación. Este abandono contrasta con las grandes cantidades que la Xunta destina año tras año, 210.000 euros en 2018. Recuerda a lo acontecido con el centro de interpretación de las Gándaras de Budiño, hoy un esqueleto urbanístico.

el cauce bajo y medio del río Miño fue uno de los más importantes recursos auríferos del imperio romano en estos lares y son multitud de restos los que aún delatan la existencia de minas de oro y de estaño a orillas del río Miño y sus afluentes. Las minas de oro del río Miño son en su mayoría explotaciones de carácter secundario creadas por la sedimentación del río durante miles de años y formadas por vetas de oro que atravesaban el río. La minería secundaria se diferencia de la primaria en que el oro se deposita en pequeñas partículas bajo

La Confederación Hidrográfica Miño-Sil podría enfrentarse a multas de 30.000 a 300.000 euros por “permitir” -según la Xunta- el vaciado de algunos de los embalses hidroeléctricos más importantes de la cuenca, que siguen bajo mínimos en casos como el de As Portas (14,57% de agua embalsada) o Cenza (13,5%). La guerra está abierta entre el gobierno autonómico y el organismo de cuenca -dependiente del Ministerio para la Transición Ecológica-, que se acusan mutuamente de mentir sobre cómo se gestionó la drástica reducción de agua en las presas