Ganándose las subvenciones

www.elindependiente.com/espana/2022/03/08/el-gobierno-aprueba-subida-1

El pasado 9 de marzo, desde UGT hicieron público un comunicado con el asunto “NO A LA GUERRA: Hoy paramos 5 minutos y guardamos silencio”, campaña estatal realizada por los sindicatos financiados por el Estado y la Unión Europea (CCOO-UGT), donde supuestamente quieren manifestar su rechazo a la GUERRA haciendo un llamado a los trabajadores y trabajadoras a parar 5 minutos y guardar silencio. “Paro” inducido por el Gobierno y apoyado por los Empresarios, los cuales, tanto unos como otros, están en un bando de la guerra: en el de los monopolios norteamericanos y de la UE.

Este sindicato financiado por el Estado y la UE, y estimulado por empresarios y Gobierno, convoca a la clase obrera a:

Abundando en que “el pueblo ucraniano”:

Ese pueblo ucraniano con el que hoy se solidarizan conoce los rigores de la guerra, del crimen y de la persecución ideológica y política desde el golpe de estado del Maidán en 2014, perpetrado por los fascistas ucranianos con el apoyo de la Unión Europea y de los EEUU. Esos mismos fascistas que incendiaron la Casa de los Sindicatos de Odessa en mayo de 2014, incendio en el que murieron asesinadas 42 personas, que ilegalizaron las ideas de los trabajadores –tanto sindicatos como los distintos partidos comunistas existentes en Ucrania– y donde el Estado ucraniano, apoyado por la UE y EEUU, ha cometido todo tipo de atropello contra la clase obrera en ese país. En todo este tiempo no hemos visto a los sindicatos CCOO y UGT rechistar sobre las vulneraciones de los Derechos Humanos, el terrorismo de estado, la persecución política y étnica perpetrada por el Estado ucraniano. Si de verdad les hubiera importado algo el pueblo trabajador ucraniano estos sindicatos (CCOO-UGT), bien financiados por la UE y el Estado español, no hubieran esperado hasta ahora para denunciar la grave situación de la clase trabajadora ucraniana y hubiera movilizado a los trabajadores del Estado español contra esta realidad que se impone en dicho país ucranio desde hace casi una década.

Dice UGT que “ningún ser humano debe sufrir el horror de una guerra”. Y tiene toda la razón. Ningún ser humano debe sufrirlo, ya sea de Libia –donde CCOO y UGT apoyaron la guerra y callan hoy sobre sus consecuencias, o de cualquier parte de este planeta, Palestina, Siria, Mali, Sudán, etcétera– y, sin embargo, CCOO y UGT no han planteado paros, ni mucho menos huelgas, a pesar de que ahí también sufren y mueren precisamente aquellos que pertenecen a nuestra clase social.

Y es que las guerras las organizan los grandes empresarios para repartirse el botín y mueren los trabajadores que son a los que lanzan a los campos de batalla a matarse entre sí. Trabajadores de un lado y de otro morirán, ya sea por el efecto de las bombas o del hambre, mientras que los grandes empresarios de uno y otro lado verán cómo se enriquecen a costa de la sangre de la clase trabajadora.

Esta guerra no se hace por desnazificar Ucrania –como falsamente dice Putin– ni por defender una libertad y una democracia que en Ucrania no existen, como dicen la UE y EEUU. Aquí la guerra se está haciendo para tratar de dar impulso a un sistema económico inviable y moribundo, aquí la guerra se hace para que unas potencias hegemónicas en lo económico adquieran esa hegemonía en lo financiero y en lo político, aquí la guerra se hace para que los tiburones hagan negocio a costa de robar a los trabajadores del mundo hasta la extenuación, y lo estáis pudiendo ver con una inflación disparada y, más claramente, en el surtidor de gasolina, donde los dueños del mundo encarecen artificiosamente los recursos necesarios para la vida de los trabajadores con absoluta impunidad, demostrando que ellos son los únicos que sacan partido de la guerra, como lo demuestra, por ejemplo, Warren Buffet que recientemente –hace un par de semanas– invirtió 4.100 millones de dólares en la petrolera Chevron.

CCOO y UGT están engañando a los trabajadores y trabajadoras. Ellos abiertamente se han posicionado con el Gobierno que envía armas a uno de los dos contendientes en la guerra, abiertamente se han posicionado con un bando, con el bando de Warren Buffet y del gobierno de las grandes empresas europeas, la Unión Europea, la misma que lleva décadas haciendo políticas en contra de los trabajadores, en contra de los pensionistas, en contra de los servicios públicos y a favor de todo tipo de privatización y saqueo a los trabajadores españoles y de Europa.

CCOO y UGT si estuvieran de verdad en contra de la guerra, exigirían al Gobierno que deje de mandar armas al Estado ucraniano –armas que, en muchos casos, caen en manos nazis, como el batallón Azov, infame por sus crímenes contra la población–, exigirían al Gobierno que desplegase una ofensiva diplomática para que la guerra cesara, exigiendo la neutralidad absoluta de España, y, sobre todo, movilizarían a la clase trabajadora para confrontarse contra un Gobierno que llama a un pacto de rentas para que los trabajadores seamos los paganos del coste de la guerra, como hemos sido los paganos de sus crisis económicas y de la pandemia del COVID-19 y sus consecuencias. Paganos todo ello con la firma de CCOO y UGT y ahí está la vergonzosa Reforma Laboral firmada hace unos meses.

CCOO y UGT con el paro de 5 minutos pretenden mostrar una imagen, que los trabajadores y trabajadoras de este país están con el Gobierno y con el bando de la guerra de la OTAN y la UE. CCOO y UGT no están contra la guerra, como falsamente dicen, sino que están ganándose las subvenciones y las prebendas a costa de estafar a los trabajadores y conquistar una fotografía con la que el Gobierno pueda decir que los trabajadores y las trabajadoras del Estado español están en el bando de los bancos, de las petroleras, de la OTAN, de EEUU y de Warren Buffet.

Os remitimos al comunicado de ASC de asunto “¡NO A LA GUERRA! ¡FUERA LAS TROPAS RUSAS DE UCRANIA! ¡NI OTAN, NI GUERRA, NI MISERIA!”.

Sólo los trabajadores organizados y unidos como clase podremos frenar la guerra y acabar con la barbarie a la que nos están llevando la plutocracia mundial y su criminal sistema económico.

¡Fortalece el sindicalismo de Clase, fortalece a la Federación Sindical Mundial (FSM), afíliate a la Alternativa Sindical de Clase (ASC)!