"Somos muchos los que pensamos que este país está podrido. Y, señores, tengamos algo bien claro: la putrefacción en la sociedad empieza como en los peces, por la cabeza. O sea, de Juan Carlos de Borbón para abajo. Y no al revés, como algunos están empeñados en hacernos creer. Unos pocos llevamos años diciendo, sin ser escuchados, que el rey hace tiempo que se vendió al servicio de las petromonarquías integristas, especialmente en Riad y La Meca. Algunos llevamos años también avisando de que la familia real está rota desde 1975 y solo el..."