La infección afecta ya a todo el territorio Chino, siendo Tíbet el último en caer. El primer ministro ruso, Mijaíl Mishustin, ha decretado este jueves el cierre de las fronteras terrestres con China para tratar de frenar la expansión hacia el país del coronavirus. Rusia, en sus regiones del Lejano Oriente, comparte con el gigante asiático más de 4.200 kilómetros de frontera. En los últimos días, varias regiones ya habían tomado esta decisión. Además, el Ministerio de Exteriores ha suspendido la emisión de visados electrónicos a ciudadanos chino