Prestan servicio a la administración autonómica y desempeñan sus funciones en los centros públicos, pero sus contratos dependen de empresas de trabajo temporal y sus condiciones laborales distan mucho de ser las que les corresponderían si fueran reconocidos como empleados públicos. En una interpelación a Susana Díaz, en el Parlamento, la portavoz de Podemos, Teresa Rodríguez, se refirió a estos colectivos de trabajadores 'de segunda' como «las 'kellys' de la Junta», comparando su situación con la de las mujeres que limpian habitaciones.
