Evitar contactos y viajes innecesarios es ahora prioritario para evitar la extensión del coronavirus. Este miércoles la Organización Mundial de la Salud (OMS) clasificó la enfermedad producida por el coronavirus SARS-Cov-2 –que afecta ya a más de 126.000 personas en todo el mundo– como pandemia. En esta nueva fase, eliminar el virus como se hizo con el SARS de 2002 parece poco probable. Ahora el objetivo es otro: frenar la curva de la epidemia, es decir, ralentizar la velocidad de transmisión, intentando así no colapsar los sistemas sanitarios.