Sola, muerta de miedo y sin calefacción. Así permaneció durante horas una bebé de apenas un año de edad en una guardería de Chicago, tras ser olvidada por los trabajadores del centro mientras su desesperado padre trataba de acceder a su interior. Tras salvar a su hija con la ayuda de los bomberos, el padre de la pequeña tuvo que soportar la penosa excusa del director de la guardería: su hija fue confundida con una muñeca y por eso no se percataron de su presencia a la hora de cerrar.