Uno de los clanes de carteristas más peligrosos del mundo ha desembarcado en España. Los miembros de esta familia rumana fueron detenidos hace años en París porque utilizaban a sus hijos, de entre 11 y 13 años, para robar a los turistas durante la celebración de eventos como la Eurocopa de 2016 o Roland Garros. Después de unos años de letargo, han vuelto a sus acciones criminales y primero se desplazaron a Madrid. De la capital fueron 'casi' expulsados por la presión de la 'Patrulla Madrid' y ahora se han trasladado a Sevilla, coincidiendo...