La iniciativa popular ‘Por una renta básica incondicional’ (RBI), sometida este domingo al veredicto de las urnas, pretendía contribuir a reducir la inequidad en un contexto en el que las diferencias salariales se disparan, la revolución digital engulle un creciente número de empleos y las prestaciones sociales dejan de estar atadas al trabajo. Los artífices de la RBI, un grupo independiente y sin vínculos con partido alguno, proponían que toda la gente en Suiza recibiera esa renta básica.