Un hombre ha sido denunciado por un delito contra la seguridad viaria en Girona por alcoholemia después de que fuese a recoger a su hija que había dado positivo en un control de alcoholemia, en concreto dio una tasa de 0,60 miligramos por litro de aire espirado, cuando la tasa máxima es de 0,25. Sin embargo, al padre se le realizó la misma prueba y tenía una tasa de alcohol de 0,71 miligramos.

La Asociación Unificada de Guardias Civiles (AUGC) ha denunciado que este Cuerpo busca volver a compensar la falta de personal con controles de alcoholemia “low cost”, en los que participen menos agentes que los reglamentados hasta ahora, para “engordar las estadísticas del número de controles realizados”.

A unos cien metros ven como un coche se detiene en el arcén y los ocupantes se intercambian los puestos para continuar su trayecto. Un poco más adelante, cuando le dan el alto en el control, el copiloto reconoce que no se encontraba bien y por eso se cambió con el conductor. Cuando la policía le hace el control de alcoholemia al individuo que está al volante, da positivo. Acto seguido se lo hace al copiloto, que hasta unos metros antes conducía el coche, y también da positivo. Además, uno se ha olvidado de ponerse el cinturón. Triple multa.

Agentes de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil detuvieron el domingo a un conductor de un vehículo que, yendo borracho a gran velocidad, colisionó en un control de alcoholemia contra otro coche, cuya conductora resultó herida, ha informado la Comandancia de Madrid en una nota de prensa.

La Guardia Civil ha detenido a un individuo, de 26 años y nacionalidad española, vecino de Murcia, por fugarse de un control de alcoholemia, conducir más de...

Increíble situación la que tuvo que vivir Carlos Sainz a su salida del circuito de Spa-Francorchamps en Bélgica. El piloto español se vio sorprendido por un control de alcoholemia en el que tuvo que soplar varias veces para demostrar que su tasa de alcohol era 0,0.

Marcelo vuelve a encontrarse con problemas con la justicia. El nombre del lateral del Real Madrid, que apura sus vacaciones en Brasil, saltó a los titulares este miércoles tras negarse a pasar un control de alcoholemia. El futbolista recibió el alto mientras conducía, informa OGlobo. No obstante, el jugador no quiso soplar, por lo que agentes le retiraron el carnet de conducir y le impusieron una multa de casi 3.000 reales (600 euros).

Si en 2012 se practicaron más de 6,5 millones de pruebas de alcoholemia, en 2017 apenas se realizaron 3 millones. Los datos ofrecidos por el Gobierno describen el descenso de controles en todas las comunidades autónomas y en todas las provincias, dándose el caso paradójico en ciudades como Madrid donde no solo desciende el número de controles a la mitad sino que además hay una notable diferencia en controles de la zona norte y sur de la capital. En 2016 se practicaron en total en España 5.071.263 pruebas mientras que en 2017 (enero a Julio)..

La policía incumplió con la orden interna de efectuar la preceptiva alcoholemia después de un accidente con heridos en Pamplona. La agente de Policía Municipal de Pamplona que no hizo el preceptivo control de alcoholemia a una edil de Bildu tras atropellar a dos personas en Pamplona es una de las reponsables del sindicato APM que organizó una campaña de escraches contra UPN.

El 33 por ciento de los controles a ciclistas en Madrid resulta positivo. La Policía Municipal lo atribuye al aumento considerable del uso de este transporte, pero también apuntan a que los jóvenes usan BiciMAD "después de tomar unas copas".

Dos agentes de policía de la ciudad de Taichung, en Taiwan, han tenido que realizar un control de alcoholemia a un menor de tan solo 5 años de edad, para poder terminar el informe del accidente que este ha sufrido al chocar con su bicicleta contra un Tesla Model 3 aparcado en la vía pública.

Un grupo de investigadores de la Universidad Militar de tecnología han desarrollado un rayo láser capaz de detectar a conductores ebrios...

Un agente de la Policía Local de Carballo (A Coruña) falleció esta madrugada al ser atropellado por un turismo cuando realizaba un control de alcoholemia.El accidente se produjo sobre las 05:30 horas de hoy a la salida de esta localidad coruñesa.

Se puso el chaleco reflectante y se echó a correr hacia unas fincas próximas a la carretera. "No voy a estar esperando por nadie para hacer la prueba de alcoholemia", dijo a la Guardia Civil para justificarse. Mientras los agentes, estupefactos, pensaban qué hacer, el acusado pretendió ocultarse entre unos matorrales. Como la presa que trata de desembarazarse de su depredador, el individuo se hizo el muerto. La Audiencia Provincial de Ourense acaba de comunicar una condena firme a 1.440 euros de multa, 7 meses de prisión...

Agentes de la Guardia Civil de la Agrupación de Tráfico investigan a un joven, identificado como V.C.C., de 22 años, por un supuesto delito contra la seguridad viaria, al ser interceptado en Abegondo (A Coruña) cuando conducía un vehículo a motor sin obtener nunca permiso de conducción. Su madre, que lo sustituyó al volante, obtuvo resultado positivo en la prueba de alcoholemia.

El incidente resulta irónico teniendo en cuenta que el pasado 28 de abril el propio Senent lamentaba que el Ayuntamiento de la Vall “se negara a mejorar la seguridad vial” del municipio.

El ex concejal de Seguridad Ciudadana de UPN en Iruñea, Ignacio Polo, ha acusado a los policías municipales de «intencionalidad», y de multarle «por enemistad» pese a reconocer haber bebido y haber triplicado la tasa de alcohol permitida.

De enero a septiembre de 2015, los agentes de la Policía Municipal de Madrid han realizado 327 pruebas de alcoholemia a ciclistas que se topaban con estos controles en las que, además de coches y motos, ahora también participan ellos, y 99 de ellas (el 30%) dio positivo. Para los que dieron positivo, la cuantía económica a pagar oscila entre los 500 y 1.000 euros, dependiendo de la tasa que genere al soplar. En ningún momento se les retiran puntos del carné de conducir, en caso de tenerlo, pues se trata de una sanción administrativa.

Esta reportera no se lo pensó dos veces y llamó a su jefe para pedir ayuda. La joven fue parada en un control de alcoholemia en México. Según los agentes se estaba negando a pasar la prueba, mientras ella insistía en que la estaban extorsionando. Lo que no sabía ella es que la policía estaba grabándolo todo.