Agentes de la Guardia Civil están desarrollando desde primeras horas de este viernes la "Operación Jaro" contra "el entorno de la organización terrorista Resistencia Galega".

Después de pasar todo el fin de semana en dependencias policiales, las nueve personas detenidas en Galicia han sido puestas en libertad tras declarar ante la Audiencia Nacional. El Juzgado de Instrucción número 6 de la Audiencia Nacional ha ordenado hoy la libertad provisional con cargos para las nueve personas detenidas el pasado viernes 30 de octubre en Galicia, en el marco de la operación Jaro, acusadas de enaltecimiento del terrorismo y de ser parte del "entorno de la organización terrorista Resistencia Galega".

El diputado del BNG en el Congreso, Néstor Rego, puso en duda la calidad democrática del Estado español desde su tribuna de la Cámara con la mención a algunas de las vulneraciones más conocidas, como es el caso de la Operación Jaro contra 12 independentistas gallegos y que incluye la pretensión de ilegalizar una organización política y otra social como son Causa Galiza y Ceivar.

Son ya más de 500 las personas que firman un manifiesto de "solidaridad" con los 12 independentistas gallegos procesados en la "Operación Jaro". La firma de este manifiesto ha conseguido unir a dirigentes de todo el nacionalismo gallego tanto sindical como político, entre ellos, a los históricos dirigentes políticos Xosé Manuel Beiras, fundador de Anova, o Francisco Rodríguez, uno de los grandes dirigentes históricos del BNG y la UPG.

Distintos actores de la sociedad gallega piden la absolución de una docena de independentistas.

La llamada democracia española hizo su debut en nuestro país, tomando, entre otras, la drástica medida de detener a menos de dieciséis militantes bajo legislación especial y colocar a sus organizaciones al borde de la ilegalidad. Ocurrió en septiembre de 1980, en un golpe de Estado que dañó gravemente al Partido del Proletariado Gallego y a Galicia Ceive (OLN) , con el pretexto de realizar una lucha armada.

La petición del fiscal es de 102 años de cárcel.

A la leyenda de El Jaro le faltaba el punto final. En 1979, hace ahora 42 años, un escopetazo acabó con la vida de José Joaquín Sánchez Frutos, alias El Jaro. Este joven indómito y montaraz cayó abatido por el disparo de un vecino de la elitista colonia de El Viso, en Madrid, cuando asaltaba en la calle a un amigo de este. El chico ya había salido mucho en la prensa, pero su mito se acrecentó con la canción que Joaquín Sabina dedicó a este “macarra de ceñido pantalón” y con la película Navajeros, inspirada en él. Pero jamás se conoció cómo fue