Y ahora, en un giro con trasfondo de Shakespeare, los dos influyentes hermanos de Washington se han encontrado en lados opuestos de los escándalos por la interferencia rusa en las elecciones de 2016. Tony Podesta y sus abogados están trabajando para resolver los problemas planteados por la investigación de Mueller y los ataques de la derecha. Ya han exigido una retractación de los medios de comunicación conservadores sobre las afirmaciones de que ambos Podestas trabajaron con el Sr. Manafort para promover los intereses rusos.

Facebook asegura que 126 millones de estadounidenses vieron mensajes para interferir en las eleciones de EEUU. Su principal plataforma es la denominada Agencia para la Investigación en Internet, aunque en realidad es más conocida por su apodo: 'Los trolls de Olgino' un barrio de los alrededores de San Petersburgo,

Facebook asegura que 126 millones de estadounidenses vieron mensajes para interferir en las eleciones de EEUU. Su principal plataforma es la denominada Agencia para la Investigación en Internet, aunque en realidad es más conocida por su apodo: 'Los trolls de Olgino' un barrio de los alrededores de San Petersburgo.

Al habla Nastya Rybka: "soy el único testigo y el eslabón perdido en la intromisión rusa en las elecciones de EE.UU. A cambio de la ayuda de los servicios secretos estadounidenses estoy dispuesta a proporcionar la información necesaria a América o Europa o cualquier país que me libere de la prisión tailandesa".

Durante el pasado fin de semana, Donald Trump parece haberse zafado de todos los controles que sus asesores puedan haber creado para prevenir que el presidente se metiera en más problemas de los que ya parece estar con la investigación a su campaña por la llamada trama del ‘ Rusiagate’. Trump cruzó una ‘línea roja’ al arremeter directamente por primera vez contra el fiscal especial que investiga el caso, Robert Mueller, con dos mensajes en su cuenta de Twitter en los que cuestiona la composición de su equipo y la propia investigación.

El principal abogado del equipo legal del presidente Donald Trump, John Dowd, renunció el jueves en medio de crecientes presiones en la Casa Blanca por la investigación del fiscal especial Robert Mueller sobre su presunta relación con la injerencia rusa en las elecciones. Dowd abandona días después de que Trump atacara directamente el trabajo de Muller calificándolo de "caza de brujas", y suscitando dudas sobre si el presidente está interfiriendo con la investigación.

Un abogado holandés vinculado con el expresidente adjunto de la campaña de Trump, Rick Gates, fue sentenciado a 30 días en prisión y se le ordenó pagar una multa de 20.000 dólares luego de admitir haberle mentido al equipo del fiscal especial para investigación de la la trama rusa, Robert Mueller. Alex van der Zwaan es la primera persona en ser sentenciada en la investigación de Mueller por la intromisión en la elección presidencial de 2016.

La campaña del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha demandado al diario 'The New York Times' por difamación y ha acusado al periódico de publicar intencionadamente una historia "falsa" relacionada con las investigaciones sobre las interferencias de Rusia en las elecciones presidenciales de 2016. Trump ha puesto la demanda en la Corte Suprema de Manhattan y busca millones de dólares por daños porque, a su juicio, el rotativo neoyorquino publicó "falsamente" que había una "conspiración con Rusia" como un hecho verídico.

Un ex abogado del FBI fue acusado el viernes y se espera que se declare culpable de falsificar documentos utilizados para respaldar la vigilancia del exasesor de campaña de Trump, Carter Page. El caso contra Kevin Clinesmith es el primero que presenta el fiscal federal John Durham, designado el año pasado para revisar los orígenes de la investigación sobre la interferencia de Rusia en las elecciones de 2016.

El exgerente de campaña de Clinton, Robby Mook, testificó el viernes que la entonces candidata presidencial demócrata Hillary Clinton aprobó la difusión de materiales que alegaban un canal de comunicación encubierto entre la Organización Trump y el Alfa Bank de Rusia a los medios, a pesar de que los funcionarios de campaña no estaban "totalmente confiados". en la legitimidad de los datos.