En tiempos como los de hoy, en los que las páginas de ofertas de empleo son de las más visitadas en la red, aparecen con cierta frecuencia anuncios insólitos que destacan entre los demás. Es el caso del aparecido en un portal español, que busca una camarera para trabajar en Asturias. ¿Sobresale porque ofrece un elevado salario? ¿Por las buenas condiciones laborales? No. El motivo no es precisamente loable.

La muchacha, el gerente del local e incluso su mujer le habían dicho que parara de hacerlo. John Key ya le pidió perdón por su comportamiento regalándole unas botellas de vino

Enhorabuena, hemos creado un país de peones y camareros que trabajan con contratos sucesivos de 7 días.

La cuenta que acaba de pedir en un restaurante de Nueva York ascendía a 43, 50 dólares (unos 38 euros ). Sin embargo el cliente pagó la friolera de 3.043 dólares (unos 2.770 euros) y ahora se ha convertido en un héroe anónimo del que sólo se sabe su hazaña solidaria y su nombre de pila: Mike. ¿Por qué lo hizo? Al parecer este cliente anónimo decidió dejar esta propina -son libres en Estados Unidos para pagar el sueldo de los empleados.- para una camarera que tenía problemas con los pagos del piso y que estaba a punto de ser desahuciada.

Es una de las historias del día. Su protagonista es Mike, cliente habitual de un restaurante de Nueva York y que decidió dejar una propina de 2.680 euros por una cuenta de apenas 40 euros. ¿El motivo? evitar el desahucio de una camarera

La Reina Letizia es ya una asidua a los bares del madrileño barrio de Malasaña. El pasado miércoles acudió a un local en compañía de algunos amigos en el cual fue atendida por un camarero republicano que no ha dudado en compartir su vivencia por las redes sociales.

El camarero admite que cometió un error al mostrar los récords de beber chupitos en una pizarra, animando así al cliente a beber más. El hombre de 56 años rompió el record del bar y murió al día siguiente. Al camarero se le condenó a una "pena suspendida" de 4 meses y se le ha prohibido trabajar en un bar durante un año.

Lo que está pasando tampoco es tan nuevo. En el mundo contemporáneo, España nunca fue un país vanguardista en desarrollo económico. Es más, sus recuperaciones y etapas de bonanza se han desencadenado desde fuera, como está sucediendo ahora, aunque sea a menor escala. Repasemos la historia: el desarrollo de los años 60, bajo la dictadura, fue a remolque de los 12 años gloriosos de Europa entre 1961 y 1973, en que se creció a un 7% anual medio.

Limitar el trabajo que están realizando los investigadores del MIT al de robots “camareros” es dejar las cosas en un punto muy simple, aunque así es como ellos están realizando la demostración de su tecnología. La potencia del proyecto la encontramos en el trabajo colaborativo de sus unidades, útil en infinidad de circunstancias.

Aprender a hacer una hamburguesa o servir un café es una labor que requiere tres años de aprendizaje. Al menos, es lo que quieren hacer ver los empresarios de la comida rápida (fast food) que han comenzado a utilizar en masa el contrato de formación (también conocido como de tarifa plana) ideado por el gobierno de Mariano Rajoy. La modalidad contractual contempla la gratuidad de las cuotas de la Seguridad Social durante la formación del joven trabajador, con un máximo de 36 meses.

Dos euros por habitación. Es lo que pagan algunos hoteles a su personal de limpieza, un colectivo integrado por unas 96.000 mujeres -en su inmensa mayoría- que trabajan cada vez más y cobran cada vez menos. Así lo denuncia Gonzalo Fuentes, responsable de Política Institucional de la Federación de Servicios de CC.OO. “Hemos detectado casos en los que se paga entre 1,5 y 2 euros por habitación”, una retribución ridícula ante la que las empleadas bajan la cabeza por miedo a quedarse en paro.

Pudo arrastarlas al sótano del restaurante mientras los terroristas mataban a los clientes en la planta de arriba.

El camarero estaba recogiendo vajilla usada por los junteros cuando ha sufrido un infarto.

El Juzgado de lo Penal número 4 de Jaén ha condenado a dos años de prisión a Juan M. O. y al pago de una indemnización de 7.386 euros por un delito de lesiones al agredir con una motosierra al camarero de un pub de Úbeda (Jaén) después de que éste le reclamara el pago de las consumiciones que se había tomado en el local.

Tal como explican las víctimas, mantenían una conversación "en la que quedaba clara su homosexualidad", lo que no debió sentar nada bien al camarero del bar. Ante esta prohibición, uno de los afectados le preguntó el por qué, a lo que el camarero alegó que él ponía las normas en "su casa". Fue en ese momento cuando se les terminó exigiendo la salida del local al grito de "maricones de mierda".

La Unión General de Trabajadores (UGT) hizo pública este viernes una carta dirigida al director general de la Inspección de Trabajo y Seguridad Social, José Ignacio Sacristán, denunciando una oferta laboral de un bar situado en Ordes (A Coruña), que solicitaba, para el empleo de camarera, a una candidata "responsable, guapa y un poco puta".

Inspectores del Departamento de Trabajo de EEUU hallaron que los dueños del Sofia's Pancake House en Kalamazoo y Benton Harbor exigían a sus camareros el pago de 2$ de las propinas cada hora bajo la amenaza de despedir a quien no cumpliera con este requisito. Los dueños han sido condenados a pagar 245.000 dólares a sus 118 empleados.

Las Kellys es un grupo de camareras de piso reunidas para denunciar las condiciones de trabajo en la que se encuentran.

El próximo 21 de abril CCOO, UGT, asociaciones profesionales de la hostelería y Alba Sud presentan ante los grupos parlamentarios el libro “Las que limpian los hoteles. Historias ocultas de precariedad laboral” y un documento de propuestas para regular el trabajo en el sector.

Por lo menos dos mujeres, una en Sanxenxo y otra en Vigo, presentaron este miércoles una denuncia particular relacionada con la publicación de una oferta laboral de contenido sexista en la web Milanuncios.com en la que se demandaba una camarera para Sanxenxo "guapa, simpática, con don de gentes, buen pecho y mínima experiencia".

"Camarera guapa, simpática, trabajadora, con don de gentes, buen pecho y mínima experiencia". Así ofrecía trabajo un supuesto hostelero de la localidad pontevedresa de Sanxenxo.