La empresa española Crambo ha desarrollado una tecnología puntera que, empleando inteligencia artificial, indica si una persona es sospechosa o no de padecer la COVID-19. Se trata de un sistema de detección que recoge parámetros médicos para identificar un posible caso de coronavirus: pulsaciones, oxígeno en sangre, masa corporal, peso y altura, reconocimiento facial y temperatura. Según explica César García, CEO de la compañía, el sistema tarda "unos 20 segundos" en identificar un posible contagio.