Israel, que el país encargado de abrir la final de Eurovisión 2017, con el cantante IMRI, se ha despedido del festival, para siempre. El país llevaba formando parte del concurso desde 1973 y había logrado ganar el certamen, en tres ocasiones: en 1978, con Izhar Cohen y Alphabeta, y la famosa canción "A-ba-ni-bi"; al año siguiente, en 1979, consiguieron otra vez el primer puesto, esta vez, con "Hallelujah" con Gali Atari y Milk and Honey, y en 1998, con Dana Internacional y su histórico tema "Diva"