El PSOE no puede pretender exportar al resto de España lo que se ha hecho durante más de tres décadas en Andalucía, y que ha dado como resultado la comunidad con más desempleo, con mayor fracaso escolar y con altísimos niveles de corrupción. Una respuesta ‘andaluza’ sería más de lo mismo y dejaría al partido al borde de la inanición política. Como alguien recordó esta semana, también Tomás Gómez fue presentado en su día como el alcalde más votado de España y al final ha sido una solemne calamidad.