El Sr. Li Kun, 60 años, estuvo detenido en la prisión de Yangjiang en la provincia de Guandong. El guardia Zeng Jianxing ordenaba a los internos que lo llevaran, junto a otros practicantes, a una celda que no tenía cámara de seguridad, para torturarlos. Además de verterles agua hirviendo sobre los pies, los guardias les perforaban los dedos de manos y pies con palillos de escarbadientes, y les tapaban las bocas con trapos empapados en heces. Hay otors caos en el artículo