Cataluña es parte de España por un matrimonio, pero en realidad es parte de un cluster que empieza en Sagunto y acaba en Tolouse. Desde una perspectiva económica, que Catalunya sea independiente con su himno, su pasaporte, con su bandera, no le hace ninguna falta. Lo que Catalunya necesita es tener una total, completa y absoluta autonomía fiscal y financiera, es decir, que después de dar no se quede peor que el que recibe después de recibir. Lo que necesita es tener capacidad de decisión.