La campaña Boicot, Desinversiones y Sanciones no se dirige solamente contra la ocupación en Gaza y Cisjordania, sino que también se ocupa del apartheid que se da dentro del propio Estado de Israel, en el territorio conquistado en 1948”, explica uno de los miembros de la iniciativa, Héctor Grad. “A los ciudadanos que no son judíos se los considera de segunda o tercera categoría y son discriminados en la vida social, en los presupuestos públicos, con un sistema educativo y sanitario separado del resto”. El objetivo es presionar a Israel