Durante el último año, han habido varios casos de especulación en los precios de algunos productos de la industria farmacéutica de EE.UU. El viernes por la tarde denunció ante sus 2,6 millones de seguidores en Twitter que la compañía Ariad Pharmaceuticals incrementó el precio de su fármaco para la leucemia, Iclusig, "más de 181.000 euros en un año". A las pocas horas, la empresa perdió el 15% del valor de sus acciones, es decir, más de 352 millones de euros.

La última, conocida ayer, es que Clinton recibió anticipadamente informaciones sobre preguntas que le serían formuladas durante un debate por la primaria del Partido Demócrata, de acuerdo con correos electrónicos revelados por WikiLeaks.

Ya saben ustedes mi apuesta y apoyo a Bernie Sanders como candidato demócrata a las elecciones presidenciales estadounidenses de este mes noviembre. Esperaba que ganase, primero, la nominación demócrata; y, después, la presidencia de los Estados Unidos. Era una apuesta por nuestro bien y el de nuestros hijos. Pero al final no pudo ser. El aparato del partido demócrata y el conglomerado mediático, unido a ciertas dudas sobre la limpieza de las primarias, acabó apuntalando a Hilary Clinton. Pero en noviembre perderá claramente ante Donald Trump..

Una y otra vez, los partidarios del socialista de pelo blanco, dijeron que los medios estaba ayudando a Clinton en las primarias demócratas, de una forma que no era ni justa ni democrática, como después se ha demostrado. Pero, ¿qué hubiese pasado si Sanders hubiese sido el candidato a la presidencia y no Clinton?

Si los demócratas de verdad creen, como dicen creer, que Trump supone una amenaza para el bienestar del país y la vida de las minorías, deberán hacer todo lo posible para alejarle de la Casa Blanca. Eso requerirá que se unan muy rápido en torno a un objetivo único, por muy ilógico que parezca: tienen que asegurarse por todos los medios de que Bernie Sanders sea el candidato demócrata a la Presidencia.

El rival político de Hillary Clinton en las primarias del Partido Demócrata, Bernie Sanders, ha ofrecido su apoyo al nuevo presidente electo en caso de que este decida apostar por "mejorar la vida de las familias trabajadoras". Así lo ha transmitido en un comunicado, en el que también analiza el éxito del multimillonario en las urnas, que atribuye a su capacidad de conectar con una "clase media en declive harta y cansada del establishment económico, político y mediático".

En un comunicado, Sanders dijo que Trump “aprovechó el enojo de una menguante clase media que está harta de la economía, política y medios de comunicación de la clase política”. Dijo que si Trump “es serio respecto a impulsar políticas que mejoren la vida de las familias de la clase trabajadora en este país, yo y otros progresistas estamos dispuestos a trabajar con él”. Pero Sanders agrega que si Trump “impulsa racismo, sexismo, políticas xenofóbicas y contra el medio ambiente, nosotros nos opondremos a él enérgicamente”.

Es la pregunta que muchos demócratas se hacen dos días después de que el republicano Donald Trump se convirtiera en presidente electo de EE.UU.. ¿Se equivocaron al elegir a Hillary Clinton como candidata?

El antiguo precandidato presidencial del Partido Demócrata Bernie Sanders ha anunciado una propuesta para "revitalizar" y "abrir" el Partido Demócrata tras la victoria de Donald Trump en las elecciones presidenciales del pasado 8 de noviembre. "En los próximos días voy a plantear una serie de reformas para revitalizar el Partido Demócrata. Creo que el partido debe romper sus vínculos con el sistema empresarial y convertirse de nuevo en un partido de bases, de gente trabajadora, de los ancianos y los pobres", ha afirmado Sanders.

Mientras gente afín a Hillary Clinton insiste en que factores externos fueron los principales para el fracaso de la contienda electoral, se alzan voces internas críticas como Bernie Sanders que dice que Hillary Clinton falló en atraer a los norteamericanos trabajadores blancos. "Pienso que se necesita un cambio profundo en la manera en que el Partido Demócrata se maneja", dijo el senador norteamericano, "no es suficiente tener una élite liberal".

El presidente electo Donald Trump se ha encontrado con un insospechado aliado si cumple con su promesa de desafiar a la América corporativa, dijo el jueves Bernie Sanders. "Si el señor Trump tiene las agallas para enfrentarse a esas corporaciones", dijo el ex candidato demócrata a la presidencia, "tendrá un aliado conmigo".

"La clase obrera de este país está siendo diezmada, por eso ganó Donald Trump", dijo Sanders. "Y lo que necesitamos ahora son candidatos que están junto a las personas que trabajan, que entienden que el ingreso familiar promedio real ha bajado". "No llega con decir: 'Soy una mujer, voten por mí'. Eso no llega". "Lo que necesitamos es una mujer que tiene las agallas para hacer frente a Wall Street, a las compañías de seguros, a las compañías farmacéuticas, a las industrias de combustible".

Trump es xenófobo, machista y de extrema derecha. Pero nada de eso les importará si con él se pueden perpetuar buena parte de las dinámicas económicas practicadas hasta ahoraLa extrema derecha avanza porque el capitalismo está empezando a necesitarla ya no solo en sus territorios satélite –América Latina, Oriente Medio, África– sino también dentro de las fronteras en las que operan sus mandos

El cofundador de Podemos, Juan Carlos Monedero, hizo este jueves una comparación, "salvando las distancias", entre las derechas de Donald Trump, Adolf Hitler y el líder de Ciudadanos, Albert Rivera , y dijo que su propósito fundamental era "agitar" los ánimos de la población descontenta. A Trump no le podía derrotar una Hillary Clinton, aseveró, en alusión a la derrotada candidata demócrata a la Casa Blanca, sino que la alternativa habría sido un Bernie Sanders.

En la conferencia anual del lobby proisraelí J-Street Sanders urgió el lunes a Israel a terminar a su ocupación de tierras palestinas y facilitar así la solución de los dos Estados. Advirtió contra una solución de paz unilateral por parte de Israel que obligue a palestinos a seguir viviendo bajo el control israelí y permita a israelíes seguir ocupando sus tierras. Comparó los crímenes israelíes para establecer el Estado de Israel (1948) con las atrocidades perpetradas por colonos europeos contra amerindios nativos para poder crear los EE.UU.

Frente al autoritarismo de Trump, el senador Bernie Sanders propugna en esta entrevista que los demócratas vuelvan a sus raíces más progresistas y abandonen a una élite progresista aislada de los votantes. "La economía mundial ha sido muy buena para las grandes multinacionales. Eso fue algo positivo para la gente con estudios, pero hay millones de personas que han sido olvidadas”. "El Partido Demócrata se ha distanciado enormemente de las necesidades de las familias de clase trabajadora de este país”.

Senador Sanders, no somos el partido del gran macho blanco - ni debemos tratar de serlo. Los demócratas deberían centrarse en traducir cómo la inclusión se traduce en un avance económico y en abordar el racismo blanco, el sexismo y la xenofobia - factores claramente importantes en las elecciones de 2016. El partido debe centrarse en "re-inspirar a los blancos que se desplazaron a los candidatos de terceros y luego centrarse en las amplias oportunidades en el suroeste y el sur"

El laborista británico, al que muchos veían un político gris, resurge gracias a la energía de movimientos sociales como el que impulsó Bernie Sanders en EE UU. Ambos se alimentan de la energía y la rabia de unos votantes insatisfechos, indignados y cansados tras años de recortes y de escuchar los mismos mensajes de unos políticos que les resultan demasiado similares; sean del partido que sean. Ambos han conectado, además, con los votantes jóvenes, una generación tradicionalmente alejada de las urnas, que está acercándose a la arena política.

"Mi meta era recordar a la gente que los estadounidenses que hablan del socialismo en el siglo XXI son un lujo pagado por los éxitos del capitalismo en el siglo XX. Y mientras que la desigualdad es un problema enorme, la mejor manera de aumentar la participación de todos en el pastel es hacer el pastel más grande, no desmantelar la panadería."

Las elecciones primarias presidenciales del año pasado entre Hillary Clinton y Bernie Sanders fueron manipuladas por el Comité Nacional Demócrata, DNC, tal como lo sospecharon los partidarios de Sanders. La prueba, según Brazile, fue un documento de acuerdo de recaudación de fondos conjunto entre el DNC, el Hillary Victory Fund y Hillary for America.

La expresidenta interina del Partido Demócrata Donna Brazile reveló en un libro que la campaña de Clinton supervisaba las decisiones del grupo político.

Si nos unimos para luchar contra los intereses de los poderosos, podemos acabar con la pobreza, aumentar la esperanza de vida y afrontar el cambio climático