[...]ninguna circunstancia,es justificable para convertir a un periodista[...], por dudosa que sea su calidad profesional, en un objetivo militar. No puedo ver con buenos ojos estas caricaturas, cuando los árabes son uno de los sectores más marginados, empobrecidos y explotados de la sociedad francesa,que han recibido un trato brutal: no se me olvida que en el metro de París, en los 60, la Policía masacró a palos a 200 argelinos por demandar el fin de la ocupación francesa de su país,que ya había dejado un saldo de un millón de árabes muertos