En un principio se pensaba que podía tratarse de relojes solares, hipótesis que pronto fue descartada porque no estaban ubicados en la posición más adecuada. En base a su análisis, entonces, estiman que se trataría de "marcas de brujas", cuya misión era ahuyentar a los espíritus malignos atrapándolos en un laberinto interminable, amplían.