El presidente de Televisión Española, José Antonio Sánchez, el mismo al que un micro abierto le pilló reconociendo, tras dos horas largas compareciendo en el Parlamento, que «menos mal» que cobra bien, ha vuelto a liarla parda. Solo que estaba vez ha sido consciente y en público, con un discurso preparado y pensado, ante la Casa América de Madrid. «España nunca fue colonizadora, fue evangelizadora y civilizadora»; «lamentar la desaparición del Imperio azteca es como mostrar pesar por la derrota de los nazis en la II Guerra Mundial».