No hablan nunca de los árbitros, pero hablan. Nunca hablan del rival, pero hablan. Presumen de valores, pero no los demuestran. Hablan de ayudar a los árbitros, pero se tiran, fingen y patalean a la primera de cambio.
El hombre al frente de esta carrera hacía un comentario muy desafortunado en Radio Marca Bilbao: "Casi casi casi nos hemos visto obligados a organizarla. Esto es cuestión de modas. Al final… La igualdad, tal… El correveidile… Todo el mundo dice que hay que hacer cosas por el deporte femenino y le ha tocado también al ciclismo". Esto ha generado automáticamente una oleada de reacciones en su contra censurando el mensaje que había lanzado Eraso.