41 saltos de gatos inespererados

En el lenguaje popular existen muchas formas para definir a un homosexual y, para su desgracia, casi todas tienen en mayor o menor proporción un sentido peyorativo e insultante. La lista de palabras,la cual no hace falta recordar por ser harto conocidas y porque en este mismo instante la estará usted repasando, es prácticamente interminable. No obstante, entre todas las palabras más o menos imaginativas que denominan a un gay, existe un número que en México se ha convertido en sinónimo de homosexual y que prácticamente se ha convertido en tabú.

Las 9.41, hora que aparece tanto en vídeos como en imágenes o en anuncios de televisión, no está puesta por casualidad. Antaño, ese tiempo fijado solía ser las 9.42, hora en la que Steve Jobs dijo "hoy Apple va a reinventar el teléfono".

El Mundial de balonmano femenino que se está celebrando desde la semana pasada en nuestro país. Irán, uno de los equipos más flojos de este campeonato, fue vapuleada por parte de Noruega, una de las favoritas al título (41-9). Su natural y emotiva reacción despertó una espectacular ovación por parte de todo el pabellón, incluidas las jugadoras del equipo rival, Noruega, quienes se prestaron más tarde para hacer una foto con el equipo iraní celebrando el premio de la portera.

4 clubes sudafricanos han sido suspendidos de por vida por su Federación. Matiyasi FC necesitaba una auténtica hazaña para ascender a la ABC Motsepe League (2a div.). Estaba en el 3er puesto con diferencia de goles perdida con los 2 primeros y sólo una goleada de escándalo podía darle opción del ascenso. Una renta de 18 goles era suficiente, pero se les fue la mano: ganaron 59-1, con 41 goles del rival en propia meta. En el otro partido en el que se jugaba el ascenso también hubo amaño: Shivulani Dangerous Tigers ganó 33-1 al Kototo Happy Boys.

Estos icónicos retratos de Walker Evans en el metro de Nueva York de viajeros anónimos (tanto física como mentalmente) son extraordinariamente poco atractivos. Simplemente son. Existen. Tomados con una cámara de 35 mm oculta, retratan a seres humanos en momentos (supuestamente) no expuestos, sin vigilancia, sin saber que están siendo fotografiados. Pero inconscientes en otro sentido: inconscientes de su entorno, de la persona que tienen enfrente o del tiempo, inconscientes de sus sueños, del pasado, del presente y del futuro.