Sucede con el buen cine latinoamericano como con la música de Calamaro y Natalia Lafourcade o la literatura de Julio Cortázar y Gabriel García Márquez. Sucede que sin darte cuenta se mete dentro y ya nunca olvidas ese acento, ese ritmo, esas historias. Historias contadas tan bien como las cuenta Adolfo Aristaráin o Alejandro González Iñárritu y tan bien representadas como lo hacen Gael García Bernal oel genio de Ricardo Darín, entre otros muchos.

Juan José Campanella (Buenos Aires, 1959) es uno de los directores más exitosos de la historia del cine argentino. Con El mismo amor, la misma lluvia (1999), El hijo de la novia (2001) y Luna de Avellaneda (2004) desarrolló un cine popular, representativo del sentir de la clase media porteña, sentimental y oscuro al mismo tiempo.