Vamos a dar una vuelta por el floral pueblecito de Yufuin en Japón, y visitamos la panadería de Kiki inspirada en el anime de los estudios Ghibli.

Mi desprecio por el dinero es infinito. Es decir, adoro tener dinero, como cualquier hijo de vecino, pero sólo para dilapidarlo y ver cómo arde. Yo gasto cuartos -cuando tengo- como si me hubiesen diagnosticado un cáncer de páncreas. Esto me viene de familia, concretamente de mi padre, un pescador que sólo ha tenido en toda su vida una semana de vacaciones. Ahí está la cuestión.

Un estudio del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) difundido esta mañana concluye que cada español paga cada mes 7.000 euros de más porque no comprueba el cambio en la panadería. “Las grandes franquicias se han hecho con el negocio del pan en España explotando la necesidad de quedar bien que tiene la gente”, confirma la entidad. “Sin saberlo, los españoles gastamos más en pan que en la universidad de nuestros hijos”, sentencian desde el CIS.

Esta pastelería de Mareny de Sant Llorenç es una de las paradas obligatorias de playeros y no tan playeros durante los meses de verano. Destaca por ser el templo del dulce y salado tamaño XXL, con cualquier cosa que puedas imaginar a tamaño gigante.

Una transeúnte se topó la pasada madrugada con una escena dantesca en el escaparate de una popular panadería de Ibiza: una rata del tamaño de un gato mediano devoraba las hogazas de pan expuestas en la vitrina. La joven grabó un vídeo, que está circulando por las redes sociales. La suciedad en la red de alcantarillado de la capital insular y la falta de limpieza de la misma explican la proliferación de ratas en la ciudad de Ibiza.

Dos perros hablando del trabajo de sus padres. Vídeo gracioso.