Cómic del Listo sobre el fenómeno de los sumisos domésticos (personas que se prestan a realizar tareas del hogar por morbo). Son 6 páginas, hay que ir clicando para acceder a la siguiente.

Las tiendas eróticas de Madrid informan de que se han disparado las ventas con los productos de sumisión y sadomasoquismo desde que salió a la venta la trilogía

(...) El Hombre de los Caramelos, cuya existencia cobra sentido para meter miedo en el cuerpo a infantes e infantas, ya no es efectivo para asustar a adolescentes. En efecto, destinada a la gente joven, existe otra variante del mismo mito: el peligro que representa la persona que echa droga al descuido en viandas o bebidas ajenas. Durante años la droga que se suministraba a traición era el ácido lisérgico. De hecho, la CIA autorizó a sus propios agentes para que se intoxicaran unos a otros al mínimo despiste.

Florentino Pérez es el verdadero «capo de la mafia» de la Comunidad de Madrid, es quien le habla por el pinganillo a la Ayuso y la utiliza como si fuera uno de sus muñecos y tiene en Almeida a un sumiso total.

En 1996, el director James Cameron y más de 80 trabajadores de la película terminaron haciendo la conga en un hospital de Canadá tras cenar un caldo aderezado con droga. Nunca se halló a los culpables, pero ahora la publicación de los informes policiales de entonces puede resolver uno de los misterios del cine