Las capitales europeas y sus miles de pueblecitos sacados de cuento abren las puertas de sus mercadillos navideños. Si estás pensando en tu próxima escapada invernal, estos mercados navideños son el plan perfecto para volver sentirte como un niño. Pueblos que parecen de un cuento, nieve sobre los tejados, luces iluminando las calles y olor a jengibre. Déjate atrapar por su magia.