Gracias a Sofia Martínez Moren, profesora de español en Estados Unidos, hemos podido ver qué comen los niños estadounidenses en sus escuelas, y la verdad es que no puede ser más triste y peor para su salud. La comida consiste en un sándwich de crema de cacahuete y mermelada que la propia Sofía afirma “no queréis verlo”, un palito de queso con crackers, una bolsa de Doritos y de postre, unas galletas.

No sabemos si existe el partido de baloncesto perfecto, pero desde luego, Alemania, ante Estados Unidos, estuvo muy cerca de firmarlo. Los teutones. liderados por Schroder (17), Theis (21), Franz Wagner (22) y Obst (23), se impusieron a los americanos y pusieron patas arriba el Mundial. Los de Steve Kerr plantaron cara a los europeos y, tras ir perdiendo por 12 en el último cuarto, llegaron a las últimas posesiones con opciones de evitar la debacle. Pero, Alemania, magnífica y muy segura, cerró uno de los mejores duelos de los últimos años.

Contundente decisión de Estados Unidos para regular los tiroteos masivos en escuelas: los menores que participen en ellos, ya sea como fuerza de asalto, ya sea como posible baja, necesitarán llevar una autorización paterna a la escuela.

Cada cierto tiempo se vuelve a hacer viral un vídeo donde se muestra a un abogado reprendiendo a los miembros del personal de un restaurante por hablar español con los clientes, en vez de inglés. Lo curioso de esta anécdota es que, si bien una gran mayoría de ciudadanos estadounidenses tienen al menos una variante de la lengua de Shakespeare como idioma principal (y único), ni la Constitución ni las leyes federales del país respaldan dicho comentario. Sí, el inglés no es el idioma oficial de Estados Unidos, y no será porque no lo han intentado.