Tras un fin de semana de caos en OpenAI, la junta directiva de la compañía nombró al antiguo director de Twitch, Emmett Shear, CEO interino a última hora del domingo. Fue el más reciente de una serie de cambios descontrolados en la empresa de inteligencia artificial (IA) después de la destitución del director ejecutivo Sam Altman el viernes, y dejó a muchos preguntándose qué tipo de directivo sería Shear, por qué el consejo lo había elegido y en qué se diferenciaría de Altman.
Shear fue uno de los cuatro cofundadores de Justin.tv, que se lanzó en 2006. Después, en junio de 2011, el sitio trasladó el contenido a su nueva plataforma Twitch, que pronto se convirtió en el lugar de referencia para la transmisión de videojuegos, con millones de usuarios mensuales. Amazon compró la compañía por 1,000 millones de dólares en 2014.
¿Emmett Shear es capaz de sustituir a Sam Altman en OpenAI?
“Es el típico ingeniero de Silicon Valley”, comenta un integrante de la alta dirección de Twitch, quien trabajó con Shear durante varios años y habló bajo anonimato, ya que no tenía autorización para declarar a los medios de comunicación. “Muy inteligente, pero torpe en lo social”. Shear no era el mejor para comunicarse, señala, y aprovechaba el hecho de contar con mucha gente experimentada a su alrededor. “Llegaba a ser muy franco”, añade.
También retrató a Shear como un personaje excéntrico que hablaba con el corazón, a veces sin pensar, según afirma. Recuerda haber estado en una presentación en la que Shear jugaba el videojuego de estrategia Hearthstone en su teléfono en lugar de prestar atención a la discusión.
Desde que la junta de OpenAI anunció el nombramiento de Shear, se han compartido en redes sociales varias de sus antiguas publicaciones en X. En una, hablaba de la prevalencia de las fantasías de agresión sexual al decir que “entre el 40 y 60% de las mujeres parecen tener fantasías de violación/sin consentimiento”; en otro, expresa que, aunque “los nazis eran muy malos”, hay escenarios peores que una toma del poder por parte de ellos. Shear no respondió inmediatamente a nuestra solicitud de comentarios.
El nombramiento de Shear como CEO de OpenAI causó confusión en todo Silicon Valley, sobre todo porque en las horas previas al anuncio hubo informes que indicaban que Altman podía ser designado de nuevo en el cargo. También se plantearon interrogantes sobre lo que la trayectoria de Shear en Twitch indicaría sobre su liderazgo en OpenAI. Mira Murati, directora de tecnología de la compañía que fue asignada a dicho puesto el viernes, solo duró un fin de semana en él. El lunes, su nombre encabezaba una lista de más de 700 empleados de OpenAI que pedían a la junta directiva que renunciara.
“Soy escéptico. Si Twitch es una muestra de lo que está por venir en la IA, podemos esperar un montón de políticas confusas y oportunidades perdidas”, argumenta Joost van Dreunen, profesor de negocios de la Universidad de Nueva York y autor de One Up, un libro sobre el negocio global de los videojuegos. “Twitch ha tenido éxito a pesar de su dirección. La plataforma sigue sin integrarse bien a la empresa matriz, Amazon, [también] mantiene una comunicación mediocre con los creadores de contenidos y los socios del sector, y ha dado prioridad a la monetización frente a la inversión en su ecosistema. Esta permanencia en el cargo debería suscitar preocupación sobre cómo evoluciona la IA a partir de ahora”.
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Pero el integrante del personal de Twitch destaca que Shear posee algunos atributos que le hacen idóneo para el puesto. “Su paso a OpenAI tiene mucho sentido para mí”, asegura. “Para él, Twitch era una plataforma de creadores que existía por el bien de las personas: se trataba menos de ganancias y más de democratizar la TV. Tiene un gran sentido ético”.
Adam Smith, cofundador de la app de email Xobni, que al igual que Twitch formaba parte de la comunidad de Y Combinator, opina que “aunque no estoy de acuerdo con algunas de las declaraciones que Emmett ha hecho anteriormente sobre el riesgo de la IA, Emmett ocupa un lugar muy destacado en mi lista de gente con la que me gustaría trabajar en algún momento. Es uno de los individuos más inteligentes que conozco, siente una intensa curiosidad por el mundo y es una gran persona”.
Alguien asociado a la aceleradora de startups Y Combinator, quien trabajó con Shear y pidió mantener el anonimato para conversar con WIRED, lo describió como un “ingeniero de ingenieros”, motivado por los retos intelectuales. “Es alguien que sabría dirigir algo muy bien desde el punto de vista tecnológico. Eso quizá inspire a algunas personas”.
La situación en Twitch ha sido difícil en los últimos años. El año pasado hubo un descontento generalizado de la comunidad por los cambios en la distribución de los ingresos de los streamers, y en marzo de 2023, Shear renunció a su cargo, argumentando que quería pasar más tiempo con su bebé recién nacido. Un artículo de 2023 en The Washington Post, publicado tras la salida de Shear, citaba a ex empleados de Twitch que sostenían que la empresa había entrado en crisis, criticando su gestión y su falta de dirección.
“Cuando se marchó de Twitch, ya era poco querido entre la gente de la empresa”, declara Mark Johnson, profesor titular de Culturas Digitales de la Universidad de Sydney. “Mucha gente interesada en Twitch lo consideraría, en los últimos años, poco receptivo a las necesidades de los creadores y de la comunidad, un poco desconectado”.
Paresh Dave y Vittoria Elliott colaboraron en la elaboración de este artículo.
Artículo publicado originalmente en WIRED. Adaptado por Andrei Osornio.
