Después de seis meses de duro trabajo, el proyecto GNOME nos trae la edición 3.24 de su popular entorno de escritorio. Llegan nuevas características, debuts de aplicaciones y las habituales soluciones a los errores de ediciones previas. Entre las novedades llama la atención Night Light, una función que ajusta de forma automática el color de la pantalla en función del momento del día. Un poco en la línea de RedShift, se trata de mantener los ritmos circadianos y la producción de melatonina intacta, evitando alteraciones del sueño.

En el entorno político, ser de una ideología determinada parece legitimar a una serie de cabestros de pensamiento contrario a escribir barbaridades de mal gusto, sin el menor ingenio, conformándose con el insulto fácil y directo. Basta que alguien opine: «Hay que bajar los impuestos en España» o «Se necesita aumentar el gasto en Sanidad», para que acto seguido tropecientos mil tuiteros le repliquen con sesudos argumentos del tipo: «muérete, hijo de puta». Es impresionante la cantidad de: «ke sabras tu, lo que ay que acer es… »

“Big Brother isn’t just watching: workplace surveillance can track your every move“, describe un panorama completamente agobiante definido no solo por la vigilancia durante las horas de trabajo o por el control de las comunicaciones de todo tipo, sino incluso por sistemas como patrones de navegación online, lectores de teclado, monitorización de mensajería instantánea, redes sociales, etc. La auténtica disfuncionalidad de los entornos profesionales, en los que el nivel de vigilancia se eleva hasta el más absoluto de los absurdos.

Una vez instalada la última versión del sistema operativo Windows hay poco que se pueda hacer más allá de comprar suscripciones y entrar en aplicaciones preinstaladas de redes sociales. Algo que supe en el primer momento es que este no es un entorno en el que quiera que mi hijo de sus primeros pasos en un ordenador real. Ni en cien años. Nunca. Algunos me recomiendan herramientas para desinstalar todo esto, pero, sinceramente, ¿se puede confiar en un sistema (o su fabricante) si ni siquiera puedo eliminar estas aplicaciones de forma confiable?

Se cumplen nada más y nada menos que 20 años del inicio del proyecto KDE, y como conmemoración por este aniversario tan importante, se ha editado un libro que recoge 37 textos bastante interesantes de los integrantes de esta gran comunidad de software libre.

El pasado mes de diciembre LinkedIn fue adquirida por Microsoft por la impresionante cantidad de 26.200 millones de dólares. Ahora nos queda por ver cómo monetiza sus 433 millones de perfiles de profesionales, 105 millones de ellos en el móvil, dos millones de suscriptores de pago y nueve millones de páginas de empresas. De entrada, ya hemos visto cómo ha modificado el diseño de su portal para asemejarlo más a sus aplicaciones móviles.

KDE Plasma 5.12 LTS nos trae la segunda versión con soporte extendido de su historia, y se consolida en la categoría de “escritorios ligeros”, ahora que han reducido –aún más– el consumo de CPU y memoria. Al mismo tiempo ha mejorado la velocidad de inicio (un 30% comparado como Plasma 5.8 LTS), deshaciéndose de algunos bloqueos que lo ralentizaban.Muchas de las mejoras vienen ligadas al protocolo de servidor gráfico Wayland, donde ya no figura como componente esencial xwayland.

Lo que actualmente nos emociona es contemplar a la tecnología avanzando con sus botas de siete leguas. Y es por esto que los entusiastas de las matemáticas están de enhorabuena (y los no tan fanáticos también). Un nuevo recurso de cálculo ha nacido. Lo que antes era un simple buscador de documentos matemáticos ahora se ha transformado en una expectacular calculadora multidisciplinar. Lo tiene todo y además explica las cuentas que hace. Su nombre es Symbolab.

KDE Connect, la forma integrada para interactuar con tu teléfono Android desde el escritorio Plasma y viceversa, ha visto algunas mejoras impresionantes últimamente. Abundan nuevas características y han sido pulidas otras. Sin embargo, de eso no se trata esta publicación.