Si en nuestra última noticia anunciábamos la propuesta de que todos los radares iban a ser previamente señalizados, ahora la última sorpresa de la Dirección General de Tráfico nos deja atónitos: Se pone en marcha un nuevo radar invisible que utiliza bandas de frecuencia muy altas que no pueden ser identificadas por los dispositivos de alerta (anti-radar) para conductores, lo que los convierte en indetectables.