El descubrimiento consiste en la sustitución de un producto químico caro, contaminante y peligroso de manipular, el cloruro de cadmio, que resulta clave en la fabricación de las células que captan la luz solar en los paneles, por el cloruro de magnesio, un ingrediente que se extrae del agua del mar . El descubrimiento del equipo de Major podría ahorrar mucho en coste de materia prima, el precio Kg bajaría de 300 dólares a 1 dólar, porque se eliminan las costosas infraestructuras necesarias para manipular y aplicar el cloruro de cadmio

Un material único descubierto en la Universidad de Texas A&M puede ayudar a desarrollar baterías más potentes basadas en magnesio, sin los problemas de disponibilidad y seguridad de las hechas de litio. Dirigido por el químico Sarbajit Banerjee, el equipo ha descubierto que esta combinación puede proporcionar baterías con mayor densidad de almacenamiento de energía y avances transformadores en seguridad, costo y rendimiento en comparación con la de ion de litio (Li-ion).

El magnesio es uno de los elementos que ha acaparado mayor atención como candidato para las baterías futuras. Ocupa un lugar muy cercano al litio en la tabla periódica, por lo que mantiene sus buenas propiedades conductoras de la electricidad, pero a diferencia de este, es más seguro, menos propenso a sufrir fallos y, sobre todo, mucho más común: se trata del noveno elemento más abundante en la corteza terrestre y el tercero disuelto en agua de mar.

La comunidad científica busca sistemas electroquímicos que empleen elementos alternativos al litio como el sodio, el potasio, el magnesio, el calcio, el aluminio y el zinc. Las baterías de iones de litio muestran una gran competitividad como sistemas de almacenamiento de energía. Sin embargo, el elevado coste de estos dispositivos, los problemas de seguridad, la baja abundancia y distribución geográfica desigual de los recursos de litio en la corteza terrestre limitan su desarrollo.

Fotografiar fué esencialmente cosa de profesionales hasta aproximadamente la década de los 1880s, empezándose a desarrollar material fotográfico más sensible y aparatos más sencillos con que usarlos para el ciudadano medio (sin tener que estar cargando tiendas de revelado y decenas de químicos), por lo que empezamos a encontrar estos aparatos y sus accesorios aproximadamente a partir de esa época. Por ello existe poca información ilustrada anterior a esa fecha sobre, en este caso, los dispositivos de iluminación artificial utilizados.

El sector metalúrgico alemán preocupado por el agotamiento de sus reservas de magnesio. La dependencia de China va a ser total. La industria de los componentes electrónicos depende de este mineral.