China contra Occidente. El ajedrez por votos

Seguramente fue el diablo el que la inventó. Hay una modalidad de ajedrez, llamada ajedrez por votos, que consiste en lo siguiente: se enfrentan dos equipos, normalmente de 10 jugadores cada uno, y cada cual propone cual será la jugada de su equipo. Entre las tres o cuatro con más apoyos se vota y esa es finalmente la jugada que se realiza, pasando el turno al equipo contrario, que hace lo mismo.

Normalmente se procura que la fuerza de los dos equipos, medida a través del ELO de sus jugadores, sea similar, pero según parece no es un tema determinante.

Lo gracioso de esta modalidad es que es casi imposible que un equipo, cualquier equipo, gane a un jugador individual de parecido nivel. Un equipo de diez maestros con ELO 2000, perderá casi infaliblemente contra cualquiera de ellos que juegue con el otro color a solas.

No es muy edificante, pero creo que algo así sucede en la competencia entre Occidente y China. Las democracias no pueden competir en organización con las dictaduras, a no ser que las sobrepasen materialmente en varias magnitudes. El tiempo de respuesta y la coherencia de los planes a medio y largo plazo es una ventaja casi imposible de igualar.

Lo que tenemos que entender es que esas aparentes victorias se consiguen a cambio de enormes sacrificios del pueblo. Pero sólo es vital entenderlo si le damos algún valor a nuestras libertades. Si no nos importan, es mejor ponerse del lado del que juega solo.

Como hace demasiada gente últimamente, me temo.