Después de haber visto y leído todas las cabronadas inmisericordes, así como las ilimitadas corruptelas de esa organización delincuencial, que debería haber sido ilegalizada, de no contar con todos los cortafuegos de una Judicatura nostálgica de los tiempos de la bandera con el aguilucho, aún me sorprende el insondable nivel de rastrerismo que pueden llegar a tener algunos de los despojos humanos que se encuentran en los máximos niveles del organigrama del PP.
Supongo que en los niveles inferiores se exige un mínimo de hijoputez para pertenecer a esa banda criminal, pero solo los más listos, los más despreciables, los más rastreros, los que evidencian la mayor falta de escrúpulos y los más abyectos, pueden llegar a ocupar lel nivel 10 del organigrama piramidal hacia arriba.
Si hay un cáncer que tiene masacrada cualquier aspiración a que este país se homologue a Europa en la corrupción, este es sin duda el PP.
Pero que para esta despreciable fábrica de carroña siga en plena vigencia aún hacen falta dos factores adicionales: una cadena de periodistas mediáticos cavernarios que les van a la zaga en cuanto a la más absoluta falta de escrúpulos y varios millones de votantes que han sido lobotomizados por esos medios.
Supongo que en los niveles inferiores se exige un mínimo de hijoputez para pertenecer a esa banda criminal, pero solo los más listos, los más despreciables, los más rastreros, los que evidencian la mayor falta de escrúpulos y los más abyectos, pueden llegar a ocupar lel nivel 10 del organigrama piramidal hacia arriba.
Si hay un cáncer que tiene masacrada cualquier aspiración a que este país se homologue a Europa en la corrupción, este es sin duda el PP.
Pero que para esta despreciable fábrica de carroña siga en plena vigencia aún hacen falta dos factores adicionales: una cadena de periodistas mediáticos cavernarios que les van a la zaga en cuanto a la más absoluta falta de escrúpulos y varios millones de votantes que han sido lobotomizados por esos medios.