Preguntado por la entrevista de sus sueños, Bertín lo tiene claro. "Creo que la entrevista soñada sería la de Hitler". Hasta ahí, todo normal. A todo periodista le hubiese gustado tener al dictador cara a cara para preguntarle unas cuantas cosas. El problema viene después, cuando le preguntan por el venezolano Nicolás Maduro y su negativa a entrevistarlo jamás: "A sinvergüenzas y delincuentes procuro no tenerlos cerca, y entrevistarlos, menos".