Los reguladores irlandeses habrían trabajado con Facebook para desarrollar unos nuevos términos de servicio que esquivasen el GDPR (ley europea de protección de datos). Esa es la dura acusación de nyob, el centro europeo de derechos digitales, una ONG austriaca centrada en iniciar demandas relacionadas con la GDPR. En el borrador de la comisión de protección de datos de Irlanda (DPC) también se encuentra el motivo por el que no ha decidido perseguir multas más cuantiosas: porque cree que Facebook no está vulnerando la GDPR.