El Banco Central de Rusia ha empezado a comprar dólares para reponer sus reservas de divisas. Se trata de cantidades relativamente pequeñas, unos 100-200 millones de dólares al día. Según los expertos consultados, estas adquisiciones están dirigidas a estabilizar el rublo, ya que un tipo de cambio demasiado bajo cuestiona los planes estatales para reemplazar las importaciones.