El camarero tomó nota del pedido cuando uno de los clientes pronunció las palabras mágicas “por favor, échale bien de chorizo que así está mucho más rica”. El camarero no pudo contener su enfado y pidió de malas maneras al grupo de amigo que se fuese. Los amigos extrañados se quedaron mirándose y un grupo de clientes cercano se acercó. “Pensábamos que venían a apoyarnos, pero eran gente de la zona con bastantes malas pulgas y nos echaron a patadas de allí”. El suceso ha sido denunciado.

Todo empezó como un simple encargo de trabajo: una pequeña reforma en el cuarto de baño. En realidad, era una encerrona, una treta que una mujer utilizó para atraer hasta su casa a un albañil que, supuestamente, había realizado tocamientos a su sobrina. Una vez en la vivienda, cuando el hombre se disponía a llevar a cabo la obra, ella le propinó una paliza -no tuvo ni el más mínimo reparo a la hora de confesar los hechos a la policía- con la pata de una silla. Los dos acabaron detenidos. Ella, por tentativa de homicidio. Él, por abusos sexuales

La Policía neoyorquina ya ha detenido a varios de los presuntos autores de la agresión, que tuvo lugar en una calle de Brooklyn a plena luz del día.

La Policía Nacional ha detenido a tres jóvenes, uno menor de edad, por haber supuestamente agredido a otro que se negó a darles un cigarrillo la noche del viernes de la semana pasada en el barrio de Hortaleza. La agresión se produjo al principio de la calle Chaparral sobre las 23 horas, cuando los tres jóvenes reclamaron, en dos ocasiones, un cigarro a otro chico que no quiso dárselo, según han afirmado sus familiares a Telemadrid. Según estos familiares, los tres agresores son residentes del centro de primera acogida 'Isabel Clara Eugenia'..

Un menor de 17 años ha sido ingresado en el Hospital 12 de Octubre después de recibir una paliza el pasado sábado 20 de marzo por parte de varios desconocidos