La plaga de la corrección política y los ataques a la libertad de expresión que estallaron en la década de los 80 y fueron vencidos en la década de los 90 han regresado para vengarse. En Estados Unidos, tanto las universidades como los principales medios de comunicación son patrullados por una policia de pensamiento bien intencionada pero despiadada, tan dogmática en sus puntos de vista como la Inquisición española. Estamos nuevamente sumidos en un caos ético donde la intolerancia se disfraza de tolerancia y la libertad individual es aplastada
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etiquetas: camille paglia , feminismo , libertad de expresion , censura
www.youtube.com/watch?v=PT1lC5WcLfE
Exactamente como los católicos de derechas.
Es lo que tiene creerse paladines de la luz y lo que es justo en posesión de la única verdad.
Un ejemplo
www.youtube.com/watch?v=iARHCxAMAO0
Esta señora esta denunciando precisamente de eso, el feminismo que infantiliza a las mujeres y el político correctismo tan centrado en acallar toda disidencia.
Women infantilize themselves when they cede responsibility for sexual encounters to men or to after-the-fact grievance committees, parental proxies unworthy of true feminists. My baby-boom generation demanded and won an end to such parietal rules, and it is tragic indeed how so many of today’s young women seem to long for a return of those hovering paternalistic safeguards. As a career college teacher, I want our coddling, authoritarian universities to end all involvement with or surveillance of students’ social lives and personal interactions, verbal or otherwise. If a crime is committed, it should be reported to the police. Otherwise, college administrations should mind their own business and focus on facilitating and funding education in the classroom.