El periodista Aimar Bretos ha comenzado este miércoles el programa de Hora 25 en la Cadena SER lanzando un mensaje rotundo sobre la homofobia que sufren las personas LGTBI, tras conocerse unas horas antes que la agresión a un joven en Madrid en la que ocho encapuchados le habían grabado la palabra "maricón" en el glúteo con una navaja era falsa y lo ocurrido era consentido.
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etiquetas: aimar bretos , homofobia , miedo , mensaje 
Yo si te creo y yo si te creo, y cuando os dan en plena cara, otra vez lo mismo, yo si te creo, yo si te creo. Pues nada, ya os cansareis. Flaco favor haceis Aimar y el resto con tanta tontería y tan poco cerebro.
Que una vez te hayas equivocado no significa que lo hayas hecho mal o que tengas que hacerlo distinto, ante una denuncia así con pruebas contundentes la reacción de la prensa y la sociedad han sido las correctas, simplemente nos han engañado, y las consecuencias de ello son... Mínimas! No pasa nada, hemos perdido el tiempo discutiendo sobre algo que no ha pasado, pues a otra cosa y ha está, pero yo volvería a reaccionar igual y no veo razón para no hacerlo.
Basta ya de estos debates de sentimientos.
El testimonio de la supuesta víctima.
OK
"y las consecuencias de ello son... Mínimas!"
Las consecuencias es que mientras estamos pagando la gasolina y la luz más cara que nunca, el gobierno hace una reunión urgente para combatir la homofobia. Ahí, solucionando los temas que afectan a todos.
Pero insistir sobre un caso que se ha utilizado mediaticamente como se ha usado este, pues me parece que está fuera de lugar totalmente.
Desde ayer no leo y oigo otra cosa que sea que las agresiones existen, pues sí, existen, pero eso justifica que montes un show absurdo cuando no tienes pruebas de nada y te rasgues las vestiduras y luego después trates al chaval como si fuera escoria humana, porque resulta que había hecho una denuncia basada en una mentira, en serio?
Como medios tanto Aimar como el resto han fallado, la clase política ha fallado y el populacho con las antorchas ha hecho el ridiculo, en vez de coger y decir, lo hemos hecho, la proxima creeremos a la victima, pero no sacaremos las antorchas hasta que realmente haya que hacerlo, en vez de hacer esto, tenemos patada para adelante y lo mucho que sufre alguien en una agresión, sí ya sabemos lo mal que se pasa en una agresión, lo sabemos de sobra, pero utilizar esto como excusa para no reconocer que tanto los medios como los politicos así como los de las antorchas hicieron el ridículo, pues ejem, desvirtua mucho tu mensaje.
Sí, ahora hay muchísima más aceptación social que antes. Pero muchísimo muchísimo más. Poco tiene que ver la España de ahora con la de hace 30 años. Antes salir del armario era un drama, y ahora es un "ya era hora, maricón. Cuéntame tus líos".
Eso no quita que en los últimos años se hayan creado unas tensiones que parecían estar superadas (y mucho me temo que con el único ánimo de captar poder político, no por convicciones reales). España sigue siendo mucho mejor ahora que antes, pero hay que vigilar y ser cautelosos para que era mejoría (y con el paso de los años) no caiga en saco roto.
¿Tengo más miedo ahora que hace 30 años? NO.
¿Tengo más miedo ahora que hace 5 años? SÍ. O por lo menos tengo que ir con un poquito más de ojo.
Aún así, el balance general y para mi, siempre es positivo.
Y repito lo de siempre: que el ruido de unos pocos no nos haga extrapolarlo a un a condición general. Los que hacen ruido se hacen notar más justamente por eso, porque hacen ruido. Pero son muchos más los que no lo hacen y los que simplemente les da igual lo que la gente haga con su vida y con su sexualidad.
PUNTO.
Las consecuencias es que mientras estamos pagando la gasolina y la luz más cara que nunca, el gobierno hace una reunión urgente para combatir la homofobia. Ahí, solucionando los temas que afectan a todos.
¿Solo pueden hacer una cosa cada vez? Algunos se reúnen para combatir la homofobia y otros llevan meses trabajando para solucionar la luz. Son muchos, pueden hacer varias cosas, y además de solucionar los problema de todos también hace falta solucionar los problemas de unos pocos, que para eso hemos votado a un gobierno sensible con las minorías y hay una escalada de agresiones homófobas independientemente de que esta fuese falsa.
Así de primeras me viene a la cabeza la tipa que se echó pegamento en el coño para denunciar a su novio por malos tratos.
El "yo te creo" es un retroceso absurdo a la mentalidad medieval.
Obviamente lo único razonable es creerselo a priori y darle todo el apoyo del mundo, y si se descubre que no era cierto se le retira el apoyo y punto, sin problema.
Lo de que el "yo te creo es medieval" no entiendo a qué te refieres, la verdad.
Pero viendo que últimamente están habiendo bastantes tensiones con el tema sí me espanta que me pueda acabar encontrando en alguna de ellas.
¿Alarma social? Sí. Fundada o infundada? eso ya es otra cuestión y que podemos discutir. Pero ver cosas como que asesinen a un chico al grito de maricón o apalicen a otros al grito de puto maricón no ayuda a ir calmado por la vida.
Este tío lo que tiene son muchos prejuicios.
Este caso solo ha sido mediatizado para usarlo, y cuando no han podido usarlo, entonces patada para adelante.
Para mi lo que deja claro este caso es que a los de las antorchas, a los politicos y a la prensa, les interesa solo la carne, ni les importan las victimas, ni les importa la gente, ni nada, solo la carnaza. Repugnante es poco.
Lo mismito.
Es como decir "yo fumo hierba pero estoy fuera del rollete típico de fumetillas".
Respecto a Marlaska, no debería dimitir, porque ni tan siquiera debería ser ministro, una persona que no investiga las torturas policiales, no debería ni ser juez, debería estar en su casa o teniendo en cuenta las veces que Europa nos ha condenado por no investigar las torturas policiales y que él está directamente involucrado en que no se investiguen, debería estar en la carcel y pudriendose dentro para siempre.
Por lo demás, la comparación que haces vuelve a ser una filia tuya, ahí no me meto.
Que tengas una buena tarde.
Nadie se creería que 200 personas lapiden a una adúltera en la plaza mayor, por mucho que lo denunciarán.
A que pone delante los sentimientos de la razón y se olvida de que la justicia es ciega.