Según informan desde The Spokesman-Review, los cuatro miembros de Decapitated han sido detenidos y permanecen en dependencias policiales desde el 9 de septiembre, tras su concierto en Santa Ana, California. La banda polaca sería sospechosa de un presunto secuestro de una mujer, supuesto que se produjo tras su concierto en Spokane, Washington, el pasado 31 de agosto. La banda está a la espera de ser trasladada a Spokane para que se resuelva el caso, cuya acusación pudiera ocasionarles varios años de prisión.
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En cualquier caso estas sabandijas concretas me dan ganas de vomitar y dan que reflexionar sobre la cacareada Polonia democrática post-Pacto de Varsovia.