El entrenador de la Arandina, Javier Álvarez de los Mozos, protagonizó un desagradable desencuentro con uno de los periodistas que cubren la actualidad del equipo, que milita en la Tercera División. En rueda de prensa le conestó con dureza, reprobando la labor de los periodistas deportivos: "No entro en vuestro fango, removeros en la mierda vosotros, que os encontráis muy cómodos ahí en la mierda para poder comer todos los días un plato de lentejas", dijo.
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Lástima que ha conseguido darles exactamente lo que buscaban, más mierda
¿Karma=sentido del humor?
El negocio informativo...
Yo les llamo hurgadores de basura.
Aunque de lo primero tengo serias dudas.
Los "curritos" tienen toda la culpa con la que puedan cargar, que el plato de lentejas se puede conseguir realizando otras labores útiles para la sociedad en vez de emponzoñarla hasta el punto de no retorno por una miseria. Ya está bien de disculpar al esclavo mezquino y servil, tanto el amo como él contribuyen a nuestro dolor.
Si no fuesen esbirros complacientes tendríamos unos medios de comunicación completamente distintos y los de arriba tendrían mucho menos poder de apalancamiento.
PD: Por cierto, si parece que "cualquiera puede ser periodista" es porque cualquiera con cierto dominio del lenguaje y capacidad analítica puede serlo, lo de pasar por la universidad para ser picateclas es sólo otro síntoma de la titulitis del sistema laboral español. No digo que no tenga técnica, digo que es un oficio que no tendría cabida en las universidades si no estuviesen tan denostadas. Papel mojado sin ningún tipo de validez.
Ahhhh, entonces está bien lo que diga ese entrenador, porque a mí como INCEL todo lo que sea denostar a las mujeres me encanta y oigo "Arandina" y ya salgo a defender como sea, como si es cagándome en el periodismo porque como hay periodistas malos se puede generalizar ¡Como con los moros! Ahora, que nadie generalice con los colectivos a los que pertenezco ¿Eh?
Tres chavales andan con un juicio a cuestas por haber abusado supuestamente de una niña, hay un cuarto involucrado al que el club acaba de fichar, que es testigo del caso, al que se llevan a vivir en el domicilio donde se produjo el presunto abuso. La pregunta exacta que le hizo el periodista no la sé, pero yo diría que aquí los periodistas están lejos de ser los malos de la historia. Si tanto quieren proteger a los chavales, haberlos apartado del club hasta que todo estuviera claro. Visto lo visto, ahora a apechugar con el efecto Streisand, por cuenta del Cromañón que tienen por entrenador.
Sensacionalismo barato, sesgo y mal periodismo.