En mayo de 2011 debutó en el Sporting Gijón. Dos meses después, dejó el fútbol. Tras su retiro, Javier Poves se hizo misionero. Vivió en Senegal. Luego, mochilero, recorrió América Latina. Don Julio lo encontró en Buenos Aires. Y le preguntó si la revolución aún existe.
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Hablemos claro. La Guardia Civil nos espera.
Lo puede hacer con 24 pero a ver con 40 o 50 donde se mete...
Poves era un central que prometía, y en en Sporting B era el jefe de la defensa, pero en la última temporada se le veía en los entrenamientos que ni corría. Se le notaba en la cara que no estaba concentrado. Se notaba muchísimo. Ese mismo año, efectivamente, el Sporting decidió no renovarle.
Este tío está muy mal